Me acojo a sagrado
de tus manos
de tus ojos…
Me acojo a sagrado
de tus orejas
de tus labios…
Me acojo a sagrado
de tu cuerpo
de tu corazón…
Me acojo a sagrado
de ti…
Me recojo en ti.
Me acojo a sagrado
de tus manos
de tus ojos…
Me acojo a sagrado
de tus orejas
de tus labios…
Me acojo a sagrado
de tu cuerpo
de tu corazón…
Me acojo a sagrado
de ti…
Me recojo en ti.
¿Por qué alicaido es estar por los suelos y alicatado suele ser hasta el techo?
Sé que, posiblemente nunca alcanzaré mis sueños, pero nada ni nadie me impedirá tenerlos.
Se quiso ir lejos de su casa. Se fue tan lejos, tan lejos, tan lejos, que al final se encontró de nuevo en su casa. Entonces comprendió que el mundo era redondo o que se había hecho un lio en algún cruce de caminos.
Si supiese lo que sé y tuviera veinte años menos… Seguiría siendo un perfecto ignorante.
¿vamos a seguir con zarandajas y componendas?
Pues nos seguirán tomando el pelo…
«Las almas ruines sólo se dejan conquistar con presentes».
Siglos después podemos seguir aplicando esa máxima, es pura actualidad.
¿Qué es más cómodo dormirse en los laureles o dormirse en la cama?
En la casa, en el trabajo, en las relaciones… En la vida… todos somos eventualmente eventuales.